Phone Number - 912692797

Bienvenida

Le ofrecemos preciosos retratos al óleo por encargo a partir de sus fotos y un servicio al cliente excepcional. Solo empleamos retratistas profesionales de gran talento para pintar sus retratos personalizados al óleo.

Seleccionar


Phone Number - 912692797

Origen y Evolución de los Retratos al Óleo

Jan Van Eyck - El hombre del turbante rojoPara ponernos en situación con respecto al origen y a la evolución de la técnica del óleo, podríamos recurrir a un diálogo imaginario basado en un hecho real en la ciudad de Brujas, al Norte de Bélgica, alrededor del año 1420. Los hechos que subyacen a este imaginario diálogo modificarían para siempre la pintura y el arte de tal modo que ya ningún cuadro escaparía a su influencia.

En aquella época, el pintor Jan van Eyck (Juan de Brujas), hablaba en su taller a un grupo de artistas del momento. Les hablaba en flamenco:

Seguimos pintando como hace cien años, doscientos, trescientos años, con todos los convencionalismos y prejuicios del gótico. Encuadrando las figuras con fondos de oropel, vacíos, sin vida, ajenos a la realidad y a la verdad. Os propongo que pintemos los hombres, las mujeres, los árboles y los campos tal como son realmente. Os propongo que pintemos la vida cotidiana, la verdad que nos rodea.

El grupo estuvo de acuerdo. Allí estaban el Maestro de Flemalle, Van der Weyden, Petrus Christus... y todos se esforzaron desde entonces en pintar con ese realismo predicado por Juan de Brujas. Y crearon la escuela Flamenca, continuada y afirmada por figuras como Bouts, van Goes, Memlinc, Bosch, Bruegel, Rubens, Jordaens, Rembrandt.

Retrato de Giovanni Arnolfini y esposaNo es extraño que Juan de Brujas fuera el elegido para iniciar un nuevo movimiento en el arte de la pintura ya que diez años antes había descubierto algo trascendental. Hasta 1410, todos los artistas pintaban sus retratos con pintura de temple al huevo. Muchos años antes, en el libro Diversarum artium schedula escrito por Teófilo (1200), se comentaba la posibilidad de dar una fina capa de aceite de oliva al cuadro terminado. Se había experimentado que después de aplicar una capa de aceite sobre la pintura al temple con huevo, los colores revivían como recién pintados. Esta técnica planteaba un problema que hasta entonces no se había podido resolver. Después de aplicado el aceite, la pintura secaba con gran dificultad y se debía exponer el cuadro al sol varios días con el posible riesgo de deterioro de la pintura, de ennegrecimiento de los colores y de pérdida de intensidad de los blancos.

Un cierto día, Juan de Brujas aplicó aceite a su pintura y después de dejarla secar al sol se cuarteó. Desde ese momento, Juan no cejaría hasta hallar un aceite que secara a la sombra. Continuó sus experimentos hasta comprobar que mezclando una pequeña porción de barniz blanco de Brujas con aceite de linaza obtenía una solución que secaba a la sombra sin ninguna dificultad.

Jan van Eyck probó entonces disolver con esa solución los colores que se utilizaban para pintar al temple. Comprobó que los colores podían ser aplicados claros o espesos, en veladuras o en capas cubrientes. Vio también que mientras secaban podían rectificarse matices y colores, que mantenían su integridad e intensidad de brillos y que a la vez secaban sin la necesidad de exponer el retrato al sol. El gran paso se había dado. Jan van Eyck había descubierto el mejor medio para pintar, la pintura al óleo. La pintura al óleo daba a los colores una luminosidad, una profundidad y una transparencia desconocidas hasta entonces e hicieron que la pintura de Van Eyck fuera considerada la más realista que se había hecho hasta entonces.

Durante los siglos 15 y 16, los venecianos crearon unas resinas menos duras y más suaves que las empleadas por la escuela flamenca. Basadas en aceites más finamente depurados, éstas facilitaron el uso de la tela como soporte, en lugar de las pesadas tablas. Este nuevo soporte para el cuadro dio un gran impulso a la pintura y aumentó tanto el consumo de las obras de arte como el número de los encargos artísticos.

Sin embargo, la innovación veneciana fue más allá, y cambió también la manera en que se aplicaba el color. Dejó de lado la aplicación de finas veladuras propuesta por la pintura flamenca e introdujo la aplicación de colores pastosos y rugosos en pinceladas densas y fuertes a gusto personal de quien pinta el retrato. Más que la luminosidad y la transparencia, esta escuela buscó la reflexión del color. Tiziano fue, quizá, uno de los más claros exponentes iniciales de esta técnica en la que las pinceladas aparecen claras y nítidas y que luego sería la que se utilizara en el arte del período Barroco.


Encarga tu retrato. Haz Clic aqui
Quiero saber más antes de encargarlo
Camara de Madrid


Phone Number - 912692797